miércoles, 18 de mayo de 2016

Mi infierno

En mi infierno el mejor desayuno sabe a cartón,
los espejos están distorsionados y no te dejan ver nada real.

En mi infierno los árboles escupen sus hojas en primavera,
el sol no calienta una mierda y la lluvia te quema la cara.

En mi infierno hay terremotos hechos a la medida,
apenas cierras los ojos todo se sacude y las lámparas rompen el techo.

En mi infierno Tom Waits tiene la voz más dulce de todas,
Ismael Serrano es una estridencia brutal de madrugada.

En mi infierno no arrulla ni el whisky,
y hay un piano que te quiebra la paz.

En mi infierno no se duerme,
las ideas te paralizan y el corazón te sacude las córneas.

Mi infierno amanece cuando le da la gana,
for the night is dark and full of terrors.


En mi infierno, lo que se va no regresa jamás.

domingo, 10 de mayo de 2015

Fantasmas

Aquí nunca estuve solo,
jamás pensé que iba a ser el único
pero nos chocamos entre tantos en la sala
y cuando llego tarde me encuentro con todos los rincones ocupados.

Si no estás nos ponemos a correr,
con los pulgares pasamos rapidito por todas tus páginas
les damos la vuelta a las sábanas
olemos tu ropa y tu champú.

Cuando le dejas solo, pobrecito
le suavizamos la verdad
le lavamos el cerebro
le ponemos sal en el café.

Luego llegas y nos escondemos,
llenamos los rincones, todos
te jalamos de las pestañas
y te pateamos el agua de los charcos.

Tienes tantos fantasmas en tu casa,
jamás vas a reconocer el mío.

martes, 5 de mayo de 2015

Es para vos

Todavía no sabemos quiénes somos. Sin embargo aquí estamos, dando tumbos por el mundo mientras esperamos que nuestros caminos se crucen estrepitosamente. No sé qué pasará exactamente, pero hay un par de cosas que se predicen fácil. Cuando nuestras miradas se crucen por primera vez, sentiremos un chispazo en un lugar del cuerpo que todavía no he logrado encontrar. Como se acostumbra en esos casos nos lo negaremos, que fue el viento el sol el cambio de la marea, el choque entre los trópicos de cáncer y capricornio será la explicación. Pero no, nos buscaremos nuevamente por los días que vengan de por medio, y nos mostraremos las soledades en la noche final. Luego de ese primer beso nada volverá a ser lo mismo nunca, huiremos aterrados día tras día y nos mentiremos a nosotros mismos, el uno al otro. Que no nos queremos que somos almas libres que es muy pronto que es muy tarde que es muy lejos que es inútil ¡qué pereza carajo! Pero la espiral se invertirá y no nos daremos cuenta de que mientras corremos convergemos hacia el centro. Luego de un rato será inevitable inservible y antivoluntad negarlo, mierda te amo quédate conmigo no te vayas nunca. La vida por fin tendrá sentido, invencibles y eternos. Te amaré salvajemente, cuando me vaya de tu lado sentirás que te falta un pedazo de alma para sentir que regresé con uno más grande cada vez que te diga que ya llegué que me urge tu abrazo. Haré las promesas más lejanas que se puedan. Pero un día aparecerá ese engendro en ese otro lugar de mi cuerpo que aún no puedo encontrar, me dirá que ya no más, que estoy harto. Como acostumbro en estos casos, también me lo negaré, etapas y rutinas serán mis pretextos preferidos. Vendrá el abismo, no vas a saber qué está pasando y no te lo diré, al final me daré cuenta de que el único invencible y eterno es el engendro. Y la espiral se invertirá de nuevo. Chau, nada que hacer contra la divergencia.

miércoles, 8 de agosto de 2012

Ni yo me acuerdo.

Hacía tiempo que no.
Por suerte vos eres nuevo,
por suerte no me conoces;
de otra forma esto de contarte tanta...
no tendría ningún sentido.

Vos eres lo único diferente,
el único que no sabe el cuento que siempre cuento
y las quejas que siempre quejo.
Aburrida debe estar la ventana,
la pobre no puede hacer lo que el otrito que hoy ya ni vino,
debe ser el feriado, el noviazgo, los compromisos, el exilio.
O como el otro que ya se jubiló,
y el otrito otro, que ya viene solo a dormir.
Y aquí estamos vos y yo,
que no sabemos todavía cual será nuestro fin,
si el aburrimiento,si el secuestro, si el retiro... si el letargo.


martes, 8 de noviembre de 2011

Pas(ill)o doble.



Me dejaste, perdido, turbio, manchado.
En el monte sin machete.
A puño limpio y palma sucia.
Construiste más paredes en el laberinto,
y recogiste el hilo, hasta la aguja;
hasta las balas.
Pero no abandonaste los papeles, menos las páginas.
Y aquí, otra vez intentando escribirle a la ella,
termino nombrándote a vos, no sin antes decir,
que pálido de la vergüenza carita sucia.
Atrasando las deudas por pagar los pecados.
Infernalmente crédulo y paradisiacamente ateo,
castigo divino es que le llaman.
Alma en pena, recogiendo los pasos,
los besos, las caricias, los ultrajes.
Yo soy el que apaga las luces
cierra las puertas abre y se lanza por la ventana.
Vos eres la que sueña, yo lo hice pesadilla.
Yo soy el que derrite el hielo con granito
y limpia tus borrones con carbón.
El solo de requinto en tus caderas tropicales.

miércoles, 26 de octubre de 2011

Rogaría.

Solo esta noche, para enamorarme,
necesito vivir enamorado, de alguien, de algo.
Esta noche y no te estorbo más,
prometo hacer mi mejor esfuerzo.
Solo ésta,
y desde la de mañana me conformo con soñarte;
solo después de haberte grabado en mis yemas,
de haberte palpado con los iris
y haberte escuchado hasta en mis huesos.
Luego de haber rasgado tus ropas y tus trenzas,
haber anclado los zapatos y largado los pies de la tierra.

Solo llévame, a tu día imperfecto, a tu noche clarita;
a tocar puertas y salir corriendo,
a tus pasatiempos baratos, a tus felicidades simples.
A tus aires cancerígenos y tus bocados cirrósicos;
que cualquier otra es una muerte lenta.

martes, 18 de octubre de 2011

¡Qué sé yo!


¿Desde cuándo se te dio por joder?
hasta las noches,
hasta los sueños,
hasta calzada.
Noche a noche,
de noche anoche;
pateando al perro,
a todos mis perros.

Bailando,
corriendo,
saltando,
de rodillas,
los viernes
¡Qué sé yo!
Si papeles o páginas,
paredes o muros,
escenas o escándalos;
si tú o vos.

Lo sabes,
lo disfrutas,
me atropellas,
los domingos
¡Qué sabes vos!
Si susurros o suspiros,
lágrimas o lagañas,
heridas o cicatrices;
si pasos o huellas.